Palma en primavera tiene un ritmo propio. Y uno de sus latidos más vibrantes lo marca, desde hace siglos, la Fira del Ram, un evento que mezcla tradición, diversión y memoria colectiva. En Nivia Born Boutique Hotel, te invitamos a sumergirte en esta experiencia con la mirada curiosa del viajero que quiere descubrir no solo la ciudad, sino su historia más viva.
De la tradición religiosa al ocio urbano
Aunque hoy la Fira se asocia con atracciones, algodones de azúcar y tómbolas, sus orígenes son profundamente religiosos. Sus primeras raíces se sitúan entre los siglos XV y XVI, ligadas a la celebración del Domingo de Ramos, de donde toma su nombre. La feria, tal como la conocemos hoy, comenzó a tomar forma en el siglo XVIII, en los alrededores del convento de Santa Margarita. Más adelante, se trasladó al centro de la ciudad, ocupando calles tan emblemáticas como Sant Miquel, La Rambla y la Plaza del Tubo, que durante buena parte del siglo XX fueron el corazón palpitante de la feria.
Estos espacios permitieron que la Fira creciera, evolucionara y se consolidara como uno de los eventos más queridos del calendario festivo de la isla. No era solo un lugar de ocio, sino un punto de encuentro donde lo tradicional y lo popular se daban la mano.
Fue en los años 80 cuando abandonó definitivamente el centro histórico para instalarse junto al Parc de la Mar y más tarde en Nou Llevant, hasta encontrar su lugar definitivo en Son Fusteret, donde cada año miles de personas redescubren el sabor de la infancia, las luces, los aromas dulces y el vértigo compartido.
Tradición, historia y una estancia con alma
Vivir la Fira del Ram no tiene por qué estar reñido con la tranquilidad y el descanso. Alojarse en Nivia Born Boutique Hotel, en pleno Paseo del Born, es la manera perfecta de disfrutar del espíritu festivo de Palma con el equilibrio justo entre energía y bienestar. Nuestra ubicación privilegiada te conecta con toda la vida de la ciudad y te permite acceder fácilmente al recinto ferial, ya sea en transporte público o en coche.
Después de una tarde entre luces, nubes de algodón y emociones compartidas, nada como regresar a la tranquilidad de tu habitación en Nivia. ¿Listo para conectar con la Palma más auténtica? Te esperamos.
